“¿Y ahora? ¿ahora qué le vas a decir?
Porque algo le tendrás que decir, ¿no?”
C. Krapp
(pensé)
(que no sea tan huevón)
Que no necesitamos más héroes.
Le tendría que decir eso.
O que le preste atención a su sueño.
A las 4:00 am
a diario
Me despierta un corazón agitado.
No hay día que cambie la hora.
Al principio creía que se trataba de mis ganas de orinar
(pararse- como un resorte- y casi dormida ir al baño)
No se trataba de eso.
O sea,
Sí, orino.
Voy al baño
regreso a mi cama
y los ojos se quedan encendidos
como fósforos.
Entonces, me digo:
Esta es una sola vida
y se me acaba.